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  • Editorial

¿Qué tienen que ver el giro político a la derecha y el rösti?

08.12.2023 – Marc Lettau

El resultado de la jornada electoral del 22 de octubre de 2023 puede resumirse en pocas palabras: la política suiza ha dado un claro giro hacia la derecha. La UDC, principal partido conservador de derechas, se regocija. Pero, ¿se trata de un simple giro a la derecha? Porque, de hecho, también ha avanzado el Partido Socialista Suizo (PSS). Y si tanto la derecha como la izquierda progresan, no podemos contentarnos con una afirmación tan sencilla y debemos tratar de explicar por qué se han reforzado ambos polos: desde las elecciones de 2019, la situación mundial y el ambiente en Suiza han sufrido un cambio radical. La pandemia ha venido a invalidar todo lo que se daba por sentado; el ataque de Rusia a Ucrania ha hecho añicos las certezas geopolíticas; el estallido de violencia en Oriente Próximo es estremecedor; y, por si fuera poco, la implosión de Credit Suisse y la explosión de los alquileres y los costes sanitarios han destruido la fe en una Suiza próspera y estable. Las cosas no marchan como deberían.

En tiempos como estos resultan más atractivos aquellos partidos que prometen protección, afirma el politólogo Michael Hermann: “El PSS dice que nos protegerá del incremento de los costes; y la UDC, de la inmigración y demás calamidades”. Los perdedores, en cambio, entre los que esta vez se encuentran los Verdes, los Verdes Liberales y los Liberales Radicales, querían incitar a los ciudadanos a asumir mayor responsabilidad, aceptando tal o cual sacrificio, asumiendo el cambio o dando más de sí mismos. La mayoría de los ciudadanos con derecho a voto (53,4 %) no quisieron asumir tales responsabilidades y no acudieron a las urnas: para ellos, la política es cosa de otros.

Pero dejemos de lado la política por un momento y permítanme explicarles por qué me salen tan bien los röstis. La clave está en los detalles: ¡no vale cualquier tipo de patata! Hay que dar preferencia a aquellas que son ligeramente harinosas. Primero, cuézalas, pero —¡muy importante!— solo al dente. Después, déjelas en el frigorífico durante dos o tres días: así perderán su humedad y adquirirán una consistencia perfecta. A continuación, rállelas, añádales algo de pimienta, suficiente sal y abundante mantequilla y… ¡a la sartén! Y entonces déjelas freír a fuego moderado ¡sin remover! Y lo principal: agregue un poco de menta al sazonar. Un rösti en su punto hace feliz a cocineros y comensales.

Ay... ¡hasta el rösti es político! Este año, la cosecha de patatas en Suiza ha sido desastrosa. Los expertos hablan ya del principio del fin: dentro de cien años, la patata ya no podrá cultivarse en nuestro país. El cambio climático —y, por tanto, la política— está teniendo un impacto muy real, hasta en nuestra cocina, independientemente de si acudimos o no a las urnas.

MARC LETTAU, REDACTOR JEFE

El aporte de Colón a nuestra cocina

¿Quizás deberíamos abordar el tema de la patata desde una perspectiva más amplia? Ya se sabe que este tubérculo no es una invención suiza, sino un recuerdo importado de Sudamérica por Cristóbal Colón. Anteriormente, la dieta helvética no incluía la patata: sémola de avena, cebada, espelta, pan, zanahorias y otros tubérculos, col, guisantes, algo de carne de cerdo, un poco de leche y queso. Nada de tomate ni de patata.

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  • user
    Henri Dubroeuc, Pleudihen sur Rance, France 22.01.2024 At 16:39

    Je lis votre article et je constate qu l'église subit les même fléaux que notre société civile. C'est clair que les abus sexuels venant de clercs est encore moins supportable que ceux venant des laics. le problème vient du fait que l'église( prêtres et laics) n'a pas respecté les demandes de la vierge Marie dans ses nombreuses apparitions. priere en famille chapelet pénitence.le monde se fourvoie dans le matérialisme. seule les églises traditionnels catholiques respectent la morale. Encore faut il que le vatican reconnaisse ses erreurs depuis 50 ans."on reconnait l'arbre à ses fruits" encore faut il regarder avec les yeux de la foi. Merci de votre article.

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